miércoles, 12 de agosto de 2009

No puedo creer que no pueda....

Si hay una cosa que no entiendo y que me abruma es que cosas pequeñas se hagan tan gigantes; y no porque lo sean, si no que uno lo hace crecer al punto que parecen verdaderos monstruos parecidos a aquellos que un se imaginaba saliendo del closet o debajo de la cama cuando uno era pequeño.
Lo cierto es que estos monstruos te hacían dormir en la orilla de la cama hacia la pared o te hacían preocuparte por cerrar el closet o saltar de la cama al suelo o viceversa, y lograban hacerte prisionero de una fantasía que no existía mas que nuestras cabezas. Esto es exactamente lo que pasa en mi cabeza en estos momentos; no tengo la capacidad de reconocer si estos monstruos que siento que me atacan se verdaderos y si lo son me encuentro tan acobardado por su imagen y presencia que soy incapaz de salir a combatirlos. Estoy con un miedo indescriptible que solo podría comparar talvez con el miedo a morir, un miedo que me ha paralizado por estos últimos 15 años y si bien en ocasiones me he armado de valor para salir a mirar, todavía no puedo armarme de valor para plantar mis pies en la tierra para poder enfrentar este monstruo hasta la muerte.
Supongo que debe ser hasta la muerte porque veo que día a día me apago y la vida se va de mí sin más, terminare muriendo igual. Muerte que será sin gloria ni desgracia, pasar desapercibido por esta vida y tal vez con un epitafio diciendo "Era un hombre que amaba a su esposa e hijos" pero que fue incapaz de amarse a el mismo..... Epitafio poco contundente si pensamos que para amar a alguien primero debes amarte a ti mismo, entonces me pregunto ¿En realidad eres capaz de amar a alguien? Creo que es una pregunta complicada, especialmente si considero que soy líder eclesiástico y que es mi deber es amar a todos, brindar consejo y consuelo a mis hermanos, pero saben; a pesar de la situación debo reconocer el poder de la mano del señor cuando uno se deja guiar por el espíritu, y se transforma en una herramienta en las manos del señor, y eso me hace amar a todos, en especial a mi familia.
Respondiendo esa pregunta que no necesariamente sea una respuesta cuerda para muchos, solo espero que el señor tenga alguien que me pueda ayudar con estos cuestionamientos, que el sea instrumento en sus manos y logre en mi lo que yo logro en otros. No espero tener las respuesta del universo pero si las herramientas para salir de este escondite y tener el conocimiento para poder utilizar las herramientas de una manera efectiva, pueda que no logre vencer a estos monstruos pero talvez pueda mantenerlos a raya, solo Dios sabe por cuanto tiempo mas estaré viviendo esta situación y se que el Padre fortaleza la espalda para que podamos llevar el peso, pero creo que uno se cansa y a la larga cede ante el peso.
Finalmente no se si tiene algún sentido lo que he escrito, pero lo que si se es que necesito ayuda y urgente

jueves, 2 de julio de 2009

Dificil comienzo. Largo final

Nunca tuve la intención de realizar este blog, ni ninguna cosa que significara expresar lo que siento en especial si considero que otras personas, incluso personas que nunca he conocido. No espero ser un genio en la escritura ni poseer palabras elocuentes para que la gente me reconozca de alguna manera, pero encuentro que tal vez escribiendo estas palabras puedo encontrar algo de paz.

Por que definí un comienzo difícil y un largo final, la verdad es que hoy he tenido una discusión con mi hija mayor y luego de 15 años por primera vez le pegue; creo que muchos padres podrían coincidir conmigo que ocasionalmente nuestros hijos requieren de un correctivo; y de hecho, si le había entregado algunos correctivos anteriormente, tal vez pueden decir "¿¿¿no esta diciendo que es primera vez que le pega???". Bueno, si efectivamente hoy es la primera vez que la e golpeado y como me mencionó me esposa, en un verdadero acto de violencia y espero que jamás vuelva a suceder. Como llegó a suceder todavía no lo se, no había un motivo real creo, pero el hecho es que la empuje y le di una cachetada no la he visto aún pero la verdad es que incluso me quedaron doliendo los dedos, como quisiera que el tiempo retrocediera y que jamás hubiera pasado sobre todo si es que creo en lo que enseña Jesucristo y su evangelio. ¿Porque un largo final?,supongo que es obvio; tengo que hacerme de la valentía para pedir disculpas y reconocer que fue un error sin duda, ahora como reparar el error.... dejará Dios hacerme saber que hacer o que decir. Supongo que lo contaré cuando suceda, sin duda es el punto mas bajo de mi vida superando incluso los 8 meses de depresión mayor, sufirda hace 2 años atrás.

Merecemos lo mejor y mis hijos merecen algo mejor que yo y espero poder proveerselo...